Un monumento de los Diez Mandamientos en
los terrenos del Capitolio de Oklahoma es un símbolo religioso, debe ser
eliminado porque viola la prohibición constitucional del Estado sobre el uso de
los bienes públicos en beneficio de una religión, dictaminó el martes la Corte
Suprema de Oklahoma.
El tribunal dijo que
los Diez Mandamientos cincelado en el monumento de granito con 6 pies de altura,
que fue financiado privadamente por un legislador republicano, es “obviamente
religiosa en la naturaleza y es una parte integral de las religiones judía y
cristiana.”
El fallo 7-2 vuelca
una decisión de un juez de la corte de distrito que determinaba que el monumento
podría quedarse.
El fiscal general
Scott Pruitt había argumentado que el monumento era de naturaleza histórica y
casi idéntico a un monumento de Texas que fue encontrado constitucional por la
Corte Suprema de Estados Unidos. Los jueces de Oklahoma dijeron que el monumento
local, violó la constitución del estado, no de la Constitución de Estados
Unidos.
“En pocas palabras, la
Corte Suprema de Oklahoma se equivocó”, dijo Pruitt en un comunicado. “El
tribunal ignoró completamente el profundo impacto histórico de los Diez
Mandamientos en el fundamento de derecho occidental.”
Pruitt dijo que
pediría a la corte una audiencia y que se permitiera que el monumento pueda
permanecer hasta que el tribunal considere su petición.
Ryan Kiesel, director
ejecutivo de la Unión Americana de Libertades Civiles de Oklahoma, que
representó a los demandantes en el caso, dijo que la sugerencia de Pruitt y las
convocatorias de juicio político ascendieron a agriar las uvas.
Desde el monumento
original que fue construido en 2012, varios otros grupos han pedido que se
también se construyan sus propios monumentos en los jardines del Capitolio.
Entre ellos se encuentra un grupo que quiere erigir una estatua de 7 pies de
altura que representa a Satanás como Baphomet, una figura con cabeza de cabra
con cuernos, alas y una larga barba. Un líder hindú en Nevada, un grupo de
derechos de los animales, y la Iglesia satírica del Monstruo de Espagueti
Volador también han hecho peticiones.
Mike Ritze, un
republicano de Broken Arrow cuya familia pagó cerca de $ 10.000 para la
construcción del monumento, empujó el proyecto de ley que autoriza el monumento.
Dijo que espera que el fiscal general tomé una decisión, si no le favorece
apelará el fallo.
El monumento original
fue destrozado en pedazos en octubre, cuando alguien conducía un coche a través
del césped del Capitolio y se estrelló contra él. Un hombre de 29 años de edad
que fue detenido al día siguiente fue internado en un hospital para recibir
tratamiento de salud mental, y los cargos formales que nunca se
presentaron.
Un nuevo monumento fue
construido y puesto en enero, pero dadas las circunstancias, el símbolo de los
Diez Mandamientos dejaría de existir en los jardines del capitolio.
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