A principios de este año, Nevada se convirtió en el primer estado en aprobar el uso de auto-conducción de coches en sus carreteras. Ahora, se le ha concedido la primera licencia para los vehículos y va a lo que es una sorpresa, para Google.
Vehículos nuevos con sede en Nevada de Google estará equipado con una placa de color rojo, que incluye un símbolo de infinito para su fácil reconocimiento. A pesar de que este es un gran paso, no estamos muy en la etapa en coches autónomos que están vagando por las calles sin supervisión. En su lugar, cada vehículo está obligado a tener dos pasajeros en todo momento, y las áreas en las que pueden ser accionados están regulados firmemente.
Aún así, es un gran día para Google y Nevada-y el rápido progreso con este tipo de proyectos nos permite casi seguro que esperar a ver los coches autónomos para el público entre una década.
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