mayo 05, 2015

Con el espíritu y el poder de Elías | Matutina para Adultos 2015

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“E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” (Lucas 1:17).
Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento la figura de Elías es un referente esencial del verdadero pueblo de Dios: la experiencia de su vida, llena de hechos portentosos fruto de una fe poderosa, su valor al denunciar los pecados de la casa real y del pueblo apóstata, el episodio del monte Carmelo desafiando en nombre del Señor al falso culto de los ídolos cananeos y haciendo descender fuego del cielo, el propio abatimiento en Horeb, su ascensión a los cielos en un carro de fuego.
Elías, este personaje singular de la historia sagrada, nos es presentado como un antecedente profético de la obra de Juan el Bautista (Mat. 11:14) y como un tipo escatológico del pueblo de Dios de los últimos tiempos.
Como en los tiempos de Elías, hoy también el mundo y muchas iglesias cristianas yerran por los caminos de la apostasía, la indiferencia religiosa, la incredulidad y la perversa transgresión de la Ley de Dios. Una sofisticada marea de mal que camufla los mismos pecados de entonces nos invade: la idolatría, la sensualidad obscena, la violencia y la rebelión contra Dios.
Por ello, Dios necesita también hoy hombres y mujeres animados con el espíritu y el poder de Elías, porque también como entonces, el Señor tiene reservados en Israel, “siete mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal y cuyas bocas no lo besaron” (1 Rey. 19:18).
¿En qué se distingue y manifiesta el espíritu y el poder de Elías?:
  1. Indignación y protesta ante la apostasía reinante.
  2. Fe anclada en el poder de Dios.
  3. Talante reformador no claudicante.
  4. Espíritu de oración y devoción.
  5. Valor indómito al denunciar el mal.
  6. Mensaje claro y certero.
  7. Comportamiento personal coherente y ejemplar.
  8. Humildad y espíritu de adaptación.
  9. Amor y compasión por el pueblo.
  10. Un individuo dependiente de Dios y no un superhombre lleno de orgullo. ¿Estás dispuesto a asumir un liderazgo como el de Elías en este tiempo? ¿Deseas usar los dones que el cielo te ha dado en el servicio cristiano? Dios te necesita y te usará para proclamar poderosamente su Palabra. Acepta hoy el reto de compartir el evangelio para que el mundo sepa que hay un Dios en los cielos.
DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2015 Pero hay un DIOS en los cielos…
Por: Carlos Puyol Buil
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