La caza furtiva de rinocerontes en Sudáfrica} Imágenes,

Las cifras del gobierno de Sudáfrica indican que la caza furtiva de rinocerontes ha aumentado sustancialmente en el último año.

Un récord de 668 rinocerontes fueron cazados por sus cuernos en 2012, casi un 50% más que en 2011. La mayoría de los animales murieron en el parque nacional de Kruger, la mayor reserva natural del país.

Sudáfrica es el hogar de alrededor de tres cuartas partes de la población mundial de rinocerontes, de unos 28.000 ejemplares. En 2007 tan sólo 13 animales perdieron la vida a manos de los cazadores furtivos. Pero desde entonces la matanza de la especie se ha incrementado sustancialmente.

Los expertos dicen que la creciente demanda de cuernos de rinoceronte en Asia está impulsando la masacre.

La cacería de rinocerontes está siendo impulsada por creencias en países como China y Vietnam, según las cuales el cuerno de rinoceronte en polvo tiene poderes medicinales y puede tener un impacto sobre enfermedades como el cáncer. Los cuernos se pueden vender por alrededor de US$ 65.000 por kilo.

Las recompensas han atraído a bandas criminales que despliegan una gama de tecnologías sofisticadas para capturar a los animales y descornarlos.

El gobierno sudafricano ha intentado luchar utilizando soldados y aviones de vigilancia, pero los números indican que está perdiendo la batalla.

De acuerdo con un informe reciente de la red de monitoreo de vida silvestre, TRAFFIC, Sudafrica ha sido testigo una reducción significativa del número de rinocerontes.

"Los rinocerontes están siendo ilegalmente asesinados, sus cuernos cortados y los animales abandonados desangrándose hasta la muerte ", dice el director de TRAFFIC, Sabri Zain. "Todo por el uso frívolo de sus cuernos como una cura para la resaca ".

Cinco rinocerontes más han caído a manos de los traficantes desde el inicio de este año, según el gobierno de Sudáfrica. Pero el país no es el único que enfrenta una amenaza para su rara población de rinocerontes.

India es el hogar de más de 2.200 rinocerontes que se encuentran en la reserva bien protegida de Kaziranga. Sin embargo, incluso el uso de alrededor de 900 guardabosques armados y guardias no ha sido capaz de detener a los cazadores furtivos. El año pasado en toda la India, 18 animales murieron, frente a diez en 2011.