La tormenta, bautizada como 'Joachim', está causando estragos en Francia y Alemania. La borrasca que azota Europa avanza inexorable hacia el Este.
El temporal dejó sin electricidad sin electricidad a 400.000 hogares franceses. Los fuertes vientos y las lluvias no sólo han provocado problemas en el transporte aéreo y ferroviario, sino que han hecho encallar un buque de carga maltés frente a la costa de Bretaña.
El accidente provocó que se dispersara en el mar el combustible que llevaba el barco, lo que causó una pequeña marea negra, agrego.
Decenas de personas, situadas en poblaciones próximas al litoral, fueron evacuadas como medida de precaución, mientras que 2.000 técnicos de la eléctrica EDF trabajan para restablecer el servicio en todo el país.
El ministro del Interior francés, Claude Guéant, aseguró por el momento no hay que lamentar víctimas, pero envió un llamamiento de alerta a la población aunque señaló que "la tormenta amaina".
Los fuertes vientos, superiores en algunos casos a los 100 kilómetros por hora, han hecho que la Autoridad de Seguridad Nuclear active el plan de vigilancia en varias centrales afectadas por el temporal.
Asimismo, el aeropuerto de Nantes ha suspendido decenas de vuelos mientras que los de París prevén retrasos a medida que avance la jornada y la tormenta se desplace hacia el este.
Nevadas en Alemania
En suelo germano, la nieve causó el caos circulatorio en amplias zonas del suroeste del país, donde numerosas carreteras quedaron cortadas por árboles y postes caídos. Mientras los servicios meteorológicos del país pronosticaban nuevas nevadas para la próxima noche.
En algunas carreteras de los estados del Sarre y Turingia se produjeron atascos de hasta 20 kilómetros de largo, coincidiendo con el fin de semana y en medio de intensas nevadas.
La actividad del aeropuerto de Fráncfort, el de mayor tráfico aéreo del continente, quedó notablemente afectada por los retrasos de los vuelos, aunque no se produjeron cancelaciones.
[El Pais]
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