marzo 08, 2014

Dios se ocupa de todo | Matutina para Mujeres

1440_900_201311061258021039146

“Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos”.                                        Mateo 18:19.
En agosto de 2010 mi madre me comentó que estaba preocupada por mi hermano Guillermo, de 23 años. Mientras cursaba el segundo año de Enfermería Profesional trabajaba, estudiaba y disfrutaba a pleno de la vida, pero en su agenda diaria no figuraba el deseo de cultivar una amistad íntima con Jesús. Entonces, le sugerí a mamá que comenzáramos a orar por él.
Meses después le diagnosticaron cáncer testicular con metástasis en abdomen e hígado. El dolor, el llanto de impotencia y la tristeza comenzaron a ser nuestra amarga realidad. La salud de Guillermo se deterioraba día a día. Los médicos no creían conveniente hacerle quimioterapia por temor a que no la resistiera.
Pasé su nombre a los grupos de oración intercesora de todas las iglesias que conocía. Dios en ningún momento se apartó de nosotros. En cada situación dolorosa que atravesábamos, él estaba allí mostrándonos qué camino tomar. La oración de cientos de hermanos, en tantos lugares diferentes, le daba fuerzas para enfrentar cada día.
A la preocupación, el miedo y la angustia de mis padres, se sumaba la falta de dinero para enfrentar los gastos. Se preguntaban cuál sería el mejor lugar para que Guillermo fuera bien atendido. De repente, nuestro querido Padre celestial se ocupó de todo: que no faltara el dinero necesario para el tratamiento; que su cuerpo tolerara las drogas; que sus venas soportaran tantos pinchazos con los inyectables; que estuviera en manos de un excelente equipo de médicos y enfermeros; que la hermandad de la iglesia recaudara fondos para ayudarlos… ¡de todo!
Hoy, Guillermo está en excelente estado de salud. Agradece a Dios por la maravillosa oportunidad de vivir. Solo desea servirlo. Ha adoptado una alimentación edénica, como Dios nos aconseja consumir.
Gracias al Señor porque ha restaurado física, emocional y espiritualmente a mi querido hermano, y gracias también a las oraciones intercesoras de tantos hermanos de iglesia. Hay poder en la oración. No dejes de interceder por alguien hoy.
Alejandra Ramírez de Ludeña, Argentina
DEVOCIÓN MATUTINA PARA LA MUJER 2014 “DE MUJER A MUJER” by: Pilar Calle de Henger,
Imagen by: v3wall
Share:

0 comentarios: