El Dios de lo imposible | Matutina para Mujeres

“Porque nada hay imposible para Dios”.

Lucas 1:37.

Siempre me gustó pensar que tenemos un Dios que todo lo puede, que nada hay en el cielo ni en la tierra, imposible para él. Historias como las de Sara, Abrahán y Pablo me recuerdan al Dios de lo imposible.

“¿Hay para Dios alguna cosa difícil?” dice el Señor (Gén. 18:14). “Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos” (Isa. 55:9). Me emociona pensar que Dios actúa así también conmigo y quiere actuar así en tu vida.

Muchas veces he sentido de cerca a ese Dios de lo imposible. Hace tiempo tuve la alegría de hacer un viaje que nunca imaginé. Mi pasaporte vencía el 31 de julio. Dos meses antes, hablando con mi madre, le decía: “Mi pasaporte está por vencerse. Pasaron casi cinco años y nunca pude realizar un viaje”. Mamá, dulcemente me contestó: “Belencita, aún queda un poco de tiempo. Quizá puedas hacerlo”. Mi mente y mi corazón lo consideraban imposible.

Pocos días después, un amigo me llamó y me invitó a que fuera a visitarlo a España. La vida nos había separado hacía ocho años, pero siempre permanecí en comunicación con él. Me había invitado varias veces, pero yo no me decidía. Un domingo me desperté mal emocionalmente, lloré y oré a Dios. Encendí la computadora y allí estaba mi amigo, invitándome nuevamente.

Vi ese mensaje como una respuesta de Dios, así que me decidí a hacer ese viaje. El 17 de junio viajé al norte de España. Pero el regalo de Dios fue mayor aún: también pude viajar por Francia, Bélgica, Holanda e Inglaterra, lugares que no estaban en mi posibilidad económica conocer.

Solo Dios podría haber hecho realidad el sueño de una joven con pocos recursos de viajar a lugares tan distantes y bellos. Todavía faltaba un imposible:

¡Regresé a la República Oriental del Uruguay trece días antes de que se venciera mi pasaporte! Sí, ¡ese es el Dios de lo imposible! Ese es el Dios que tiene pensamientos mucho más grandes que los nuestros.

¿A veces piensas que Dios no se acuerda de ti? Este es otro de los “imposibles” para él, pues te ama tanto que es imposible que se olvide de ti. El todo lo puede. Solo tienes que confiar y esperar.

LECTURAS DEVOCIONALES PARA LA MUJER 2014
DE MUJER A MUJER
by: Pilar Calle de Henger, Imagen by: v3wall.com