julio 25, 2016

Los buenos tiempos de antaño | Matutina para Adultos 2016

La esperanza de los elegidos

“En la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, creyéndolo y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra”. Hebreos 11:13

¿NO TE GUSTARIA QUE viviésemos en “los buenos tiempos de antaño”, cuando los padres eran amantes, los hijos obedientes y las familias felices? ¿Qué te parece si hacemos un inventario de los hogares modélicos entre las grandes “primeras familias” de la historia sagrada? Para ayudarnos a descubrir las familias modelo, démosles calificaciones en forma de letra: A para modélica/ideal, C para promedio y F para suspenso. Allá vamos.
Adán y Eva. Todos queremos darles una A por ser nuestros valientes progenitores, pero ni siquiera un hogar perfecto puede impedirte que metas la pata, ¿verdad? C. ¿Qué tal Caín y Abel? Eso sería una enorme F: ahí no había armonía entre hermanos. ¿Y las familias anteriores al diluvio? Caín huyó de casa, Lamec introdujo la poligamia, a Enoc le fue bien, pero los matrimonios mixtos de los linajes de los fieles y los rebeldes causó el desmoronamiento de la sociedad: C o F o un valor intermedio para todo su árbol genealógico. Noé, su señora y sus chicos. Un final vergonzoso para la familia, pero seamos generosos: C (vale, vale: B*).
Abraham y Sara. Una pareja feliz sin hijos, pero mintieron a sus vecinos para mantener contento al maridito. Después, la debacle de Agar fue una auténtica chapuza, ¿no crees? Un esposo y padre, dos esposas y madres y un par de hermanastros malcriados. Una nota benévola habría sido C, ¿no? ¿Fueron Isaac y Rebeca mejores? Parecían felices, ciertamente, aunque tampoco tenían descendencia, y también eran mentirosos.
Y echaron a perder el don divino de los gemelos Esaú y Jacob eligiendo favoritos. A partir de ahí todo fue cuesta abajo. ¿Las calificaciones? C para los padres y una F para la rivalidad entre hermanos. ¿Fue mejor el caso de Jacob y sus esposas hermanas Lea y Raquel, dos concubinas y doce hijos varones, uno de los cuales se acostó con una de las esposas de Jacob y diez de los cuales exacerbaron el conflicto intestino hasta profundidades vergonzosas al vender a su medio hermano como esclavo? ¿La nota para Jacob y compañía? F“. Solo he podido encontrar un matrimonio sin tacha: José y Asenat. ¡Démosles una A!
¿“Los buenos tiempos de antaño”? ¡Estarás de broma! La comunidad de los elegidos estuvo en una situación de debacle familiar desde el comienzo. ¡Si la desgracia compartida es menos sentida, deberíamos estar todos felices! Porque es una buena noticia: el Dios de los elegidos nos toma tal como somos -disfuncionales, vulnerables y débiles- y nos ama a pesar de todo y sigue guiándonos, y a nuestras familias deshechas, hasta que alcancemos la tierra prometida.
* El sistema de calificación escolar norteamericano usa letras de la A a la F. Para aprobar, hay que obtener como mínimo D. E y F denotan deficiente y muy deficiente, respectivamente. Una letra acompañada de los signos más (+) o menos (-) indica un nivel superior o inferior dentro de esa calificación.

DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2016
ELEGIDOS
El sueño de Dios para ti
Por: Dwight K. Nelson

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