Se llama Omote 3D. Y se trata del primer estudio “fotográfico” en 3D. En lugar de capturar una sola imagen, el proceso consiste en crear un modelo en 3D de la persona, que luego es impresa en la cada vez más populares impresoras 3D, para obtener resultados como estos:
Como pueden ver, es un proceso que, utilizando cámaras infrarrojas, capturan nuestro cuerpo en tres dimensiones (algo así como lo que hace, por ejemplo, el Kinect de Microsoft). Este primer paso demora 15 minutos, mientras otra persona captura todos los detalles con el scanner en 3D. Luego, esta información pasa de la PC a una impresora 3D que, finalmente, nos devuelve una figura tridimensional. Básicamente, nuestro propio “action figure”, tal y como posamos para la foto. Lo único malo es que todo el proceso puede tardar entre 1-2 meses.
[Omote 3D]
0 comentarios:
Publicar un comentario