Un tornado con vientos de hasta 320 kilómetros por hora azotó este lunes la localidad de Moore, un suburbio del sur de Oklahoma City, y dejó un total de 51 muertos.
Una portavoz de la oficina forense del estado informó que se espera que la cifra de fallecidos continúe aumentando en las próximas horas.
El edificio de la escuela primaria Plaza Towers resultó ser uno de los más afectados. El tornado destruyó el techo y tumbó las paredes.
A pesar de la gravedad de lo ocurrido, varios niños fueron rescatados con vida. Se teme, sin embargo, que haya víctimas debajo de los escombros.
Los trabajadores de rescate formaron una cadena y fueron cargando a los niños hasta un centro de triaje improvisado en el estacionamiento de la escuela.
El tornado tocó tierra a las 16:00 hora local de este lunes. En Moore viven unas 55.000 personas.
La residente Kim Schwab, visiblemente afectada y con raspones leves en sus piernas, observa lo que quedó de su casa.
"Va a tomar mucho tiempo antes de recuperarnos de algo como esto", dijo a CNN Tom Cole, un congresista que representa a Oklahoma City. En la imagen se observan los daños que sufrió un centro comercial y su estacionamiento.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, habló por teléfono con la gobernadora de Oklahoma, Mary Fallin, para expresar su preocupación por lo ocurrido y por todos los afectados, según indicó la Casa Blanca.
Fallin dijo en una conferencia de prensa que se sentía devastada por aquellos padres que en este momento están buscando a sus niños.
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