En los mercados asiáticos, un euro se intercambió por 94,71 yenes, una cifra que no se había visto desde noviembre del año 2000.
El viernes, la región española de Valencia le pidió ayuda financiera al gobierno central, apuntalando temores en relación con el problema de la deuda en la nación ibérica, que estaría empeorando.
"La preocupación persistente en torno a España sigue hundiendo el euro", pues los inversores dudan cada vez más de la capacidad del país a superar sus problemas sin ayuda exterior, mientras que el "dólar se aprovecha de sus estatuto de valor refugio", dijo Craig Erlam, analista de Alpari.
El plan de apoyo de la zona euro para los bancos españoles, definitivamente aprobado el viernes, no ha bastado para tranquilizar a los operadores pues "está claro que los efectos de estos esfuerzos se están evaporando", dijo Simon Derrick, analista de BNY Mellon.
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